Unas oficinas en Salta se erigen y forman parte de su entorno natural

El proyecto se ubica sobre carretera más importante de la ciudad de Salta. Se encuentra en un sector montañoso característico de esta zona. El sitio es de 100m x 22m, con acceso desde ambos extremos y con la particularidad de estar dividido en dos por un canal, por lo tanto, una mitad es plana, y la otra tiene características topográficas significativas. 

Para aumentar al máximo el sitio con el menor coste posible, tanto económico como medioambiental, y tratando de integrar el edificio con el paisaje, se tomó la decisión de reconstituirlo con la arquitectura. De este modo se evita la aparición de grandes muros de contención. 

Se divide funcionalmente en dos partes. En la zona de la quebrada, con vistas a la calle principal, se diseñaron las oficinas administrativas y comerciales, la sala de reuniones con servicios en la primera planta, todas ellas elevadas sobre el sitio, dejando espacio para los servicios de construcción. En la zona plana, diseñamos la casa del guarda, una galería, oficinas de recepción de productos, y un área de almacenamiento con acceso diferenciado para los camiones. Un eje peatonal une los dos sectores a través de un puente metálico de 22 m de largo y 3 m de ancho. 

Los materiales fueron adaptados a los requisitos del proyecto, de entorno y de la construcción. Hormigón expuesto se utilizó para separarlo de la planta y para contenerlo. Se utilizó la estructura metálica para el puente y la bodega, y el sistema de marco de acero para aligerar el peso debido a problemas sísmicos. 

No hubo problemas con la aplicación de los reglamentos de urbanismo y construcción. Los servicios de alcantarillado y agua eran inexistentes por lo que se instaló una planta de tratamiento de aguas residuales y un pozo de agua. 

El proyecto reunió a sus necesidades y también transgredió los límites de su territorio, con la participación de nuevos edificios que el entorno incorporó a su materialidad.