La importancia del diseño de luminarias en tratamientos para el autismo

Los sistemas LED son una herramienta novedosa que beneficia notablemente tratamientos en condiciones del neurodesarrollo y el autismo.

 Kim Steele y Sherry Ahrentzen, profesionales en salud y diseño, lanzaron un libro que destaca la importancia de la iluminación para el tratamiento del espectro autista, “At Home with Autism: Designing Housing for the Spectrum”. Sólo en Estados Unidos, hay más de tres millones y medio de personas diagnosticadas con algún tipo de autismo.

Las luminarias podrían cumplir un rol importante en la mejora de calidad de vida de las personas dentro del espectro. Las autoras señalan que hay que evaluar cada situación particular, como la ubicación, el diagnóstico y los recursos disponibles. Sin embargo, también afirman que hay soluciones que frecuentemente son funcionales para el autismo como para la población general. 

El parpadeo luminoso y los sonidos que pueden emitir los aparatos lumínicos son algunas de las medidas que afectan gravemente a las personas con autismo y pueden evitarse, beneficiando la calidad de vida. La hipersensibilidad a los estímulos del entorno causan perturbaciones con más facilidad en las personas dentro del espectro.

Pero también hay medidas más puntuales que deben adaptarse personalizadamente a la condición de cada persona. Cuestiones específicas como la atenuación, la intensidad lumínica y hasta la reproducción cromática son algunas de las características de la luz que hoy se pueden dominar para generar un entorno menos agresivo. 

Las tecnologías LED tienen un protagonismo especial en este sentido, ya que son las que ofrecen sistemas de control más sofisticados. Los nuevos productos que desarrolla la industria son mucho más permeables a personalizarse de acuerdo a la hipersensibilidad o hiposensibilidad del consumidor, permitiendo fuentes controlables y opciones para evitar la luz fluorescente.